La plataforma Stop Biogás Los Camachos–Cartagena–Mar Menor ha vuelto a salir a la calle este miércoles, esta vez frente a la Asamblea Regional, para protestar contra la Ley de Simplificación Administrativa, aprobada con la abstención del Partido Socialista Obrero Español (PSOE)
Una treintena de personas se concentraron ante el Parlamento autonómico coincidiendo con el debate del texto legislativo, portando pancartas en las que se podía leer ‘Macroplanta de biogás, no aquí’ y ‘Planta de biogás. Mentiras cochinas’.
Los vecinos temen que esta nueva ley “relaje las evaluaciones ambientales, reduzca la transparencia y limite la participación pública efectiva”, lo que podría facilitar la tramitación del proyecto de Heygaz Biomethane para construir una planta de biogás en el polígono industrial de Los Camachos.
“La Ley de Simplificación Administrativa ha salido adelante. Es una ley muy abierta, pero que beneficia claramente a las empresas”, ha señalado Lola Martínez, miembro y responsable de comunicación de la plataforma. “Aun así, nosotros vamos a seguir. Estamos dando charlas informativas en las asociaciones de vecinos para que la gente sepa lo que se está haciendo”.
Martínez ha adelantado que este jueves habrá una charla en la Asociación de Vecinos de Los Beatos, y el sábado en La Unión, dentro de la campaña de información ciudadana que la plataforma mantiene desde septiembre.
Además, los colectivos están preparando una futura concentración frente a la Autoridad Portuaria de Cartagena, ya que los terrenos previstos para la macroplanta se encuentran dentro de su área de influencia.
“Seguiremos luchando para que la gente conozca lo que se está haciendo”, ha afirmado Martínez, quien insiste en que el proyecto sigue siendo “inviable” por su cercanía a viviendas, negocios y la Rambla de Miranda, que conecta con el Mar Menor.
La plataforma, que ya protagonizó una protesta frente al Ayuntamiento el pasado 9 de octubre, considera que este tipo de iniciativas se enmarcan en un modelo “opaco” de desarrollo industrial. Reclaman que se apueste por microplantas locales que gestionen los residuos de forma descentralizada y reduzcan el impacto ambiental y logístico sobre el entorno.