La brecha salarial de género sigue siendo una realidad en España, con una diferencia del 17,09% entre los sueldos de hombres y mujeres, según el monográfico ‘La brecha salarial existe, que no te confundan» publicado por el Instituto de las Mujeres con motivo del Día para la Igualdad Salarial. Sin embargo, esta desigualdad se agrava en algunas comunidades autónomas, situando a la Región de Murcia a la cabeza, con una brecha del 20,14%, la más alta de España.
De acuerdo con los últimos datos de la Encuesta de Estructura Salarial de 2022, la ganancia media anual de los hombres en España fue de 29.381,84 euros, mientras que las mujeres percibieron 24.359,82 euros, una diferencia de 5.022 euros anuales. Aunque la brecha ha disminuido 6,83 puntos en la última década, a este ritmo serían necesarios 25 años para alcanzar la igualdad salarial.
El informe revela que la desigualdad salarial afecta de manera diferente según la edad, el sector económico, la jornada laboral y la nacionalidad. La brecha es más pronunciada en menores de 20 años (28,64%) y mayores de 65 (25,57%), mientras que se reduce en el grupo de 25 a 29 años (9,81%). Además, las diferencias salariales son menores en el sector público (8,4%) que en el privado (13,4%) y se agravan en las jornadas a tiempo parcial.
Las actividades económicas con mayor brecha retributiva son las actividades administrativas (26,69%) y las actividades profesionales, científicas y técnicas (26,07%). Además, la maternidad sigue impactando de manera negativa en la empleabilidad de las mujeres, ya que el 88 % de las excedencias por cuidado son asumidas por trabajadoras y el 92,4% de los contratos a tiempo parcial por motivos familiares los ocupan mujeres.
Las diferencias también se observan en función de la nacionalidad: mientras que la brecha entre la población española es del 17,38%, en el caso de las trabajadoras africanas asciende al 28,92% y entre las europeas no comunitarias llega hasta el 33,72%.
El estudio también pone el foco en los convenios colectivos, que perpetúan la desigualdad a través de categorías profesionales feminizadas y complementos salariales discriminatorios. Además, destaca que el 24,8% de las mujeres cobra un salario igual o inferior al SMI, mientras que en los hombres este porcentaje es de menos del 11%.
Por último, el informe subraya la carga desigual del trabajo doméstico y los cuidados, ya que las mujeres dedican 4 horas y 7 minutos al día, mientras que los hombres apenas invierten 1 hora y 54 minutos. Esto, sumado a las dificultades de conciliación y la falta de corresponsabilidad, contribuye a la persistencia de la brecha salarial en España.