Cartagena se prepara para la apertura de Harrison Grand Café, el buque insignia del recién creado Grupo Harrison Costa Cálida, de origen cartagenero, que prevé abrir sus puertas a mediados de noviembre en el Casino, en pleno corazón de la Calle Mayor.
El proyecto, liderado por Juan Pedro Rubira, empresario con una amplia trayectoria en el sector de la restauración (fue gerente del Grupo Parador durante cinco años), aspira a revolucionar el mercado hostelero de la ciudad con un concepto que une gastronomía, coworking y ocio sofisticado en un mismo espacio.
“El nombre Harrison representa elegancia y sofisticación, pero aplicadas a la gastronomía y al ocio”, explica Rubira, que define el local como un gran café europeo al estilo parisino: un lugar donde desayunar, disfrutar de un brunch o tomar una copa al caer la tarde, todo en un mismo entorno. “Queremos recuperar ese espíritu de los cafés donde la gente se encuentra, conversa, trabaja y disfruta sin prisas”, añade.
El modelo se basa en la versatilidad. En la planta baja se habilitará una zona de coworking para quienes deseen trabajar durante el día, mientras que la planta superior acogerá un comedor premium y varios palcos con vistas directas a la Calle Mayor. Rubira destaca que este enfoque “permite que el local viva las 24 horas, adaptándose a cada momento del día”. La inversión prevista, de entre 70.000 y 90.000 euros, se destinará a una remodelación completa que incluirá mobiliario nuevo, iluminación indirecta, sonido ambiental y una cocina moderna, todo ello respetando la estructura histórica del edificio.
El gerente subraya que abrirán todos los días y que la oferta está pensada para todo tipo de público: locales, turistas y cruceristas. “Queremos que Cartagena deje de mirar a otras ciudades para disfrutar de este tipo de ocio. La ciudad está en su mejor momento y creemos que Harrisond puede marcar un punto de inflexión”, afirma.
Un café con historia: el Palacio Casa Tilly como símbolo de elegancia y cultura
El enclave elegido para Harrison no podía ser más simbólico. El Palacio Casa Tilly, actual sede del Casino de Cartagena, es un edificio del siglo XVIII reformado a finales del XIX por el arquitecto Víctor Beltrí, y declarado Bien de Interés Cultural (BIC). Su escalinata imperial, sus techos artesonados y su arquitectura modernista lo convierten en uno de los espacios más reconocibles y valiosos de la ciudad.
“Locales así ya no se encuentran. Sabíamos que era una oportunidad única”, afirma Rubira. El lugar encaja con la filosofía de Harrison, una marca de estilo clásico y sofisticado, concebida para nacer precisamente en un entorno de valor patrimonial. “Queremos conservar la personalidad del edificio y su estructura, pero aportando diseño, confort y vida diaria. Los edificios culturales no se pueden tocar, pero sí reinterpretar”, explica.
Además, la colaboración con el Casino de Cartagena añade un valor añadido: el restaurante ofrecerá servicio exclusivo para los socios y asistentes a eventos culturales, reforzando así la revitalización del propio Casino, que en los últimos años ha potenciado su agenda artística y social.
Un punto de encuentro para las fiestas y la vida social de Cartagena
Más allá de la gastronomía, Harrison Grand Café quiere convertirse en un referente de vida social en Cartagena. El local abrirá todos los días del año, con una oferta que incluirá desde café de especialidad y brunchs hasta comidas y copas al atardecer. “Queremos que la gente pueda venir a trabajar, comer bien y quedarse después a disfrutar de un ambiente agradable”, resume Rubira.
El calendario festivo también tendrá un papel central. Harrison planea una campaña especial de Navidad y celebrará la Nochevieja. Durante las fiestas de Cartagineses y Romanos o la Semana Santa, los palcos del piso superior, con vistas directas a la Calle Mayor, se convertirán en zonas VIP para grupos, y la terraza exterior contará con mesas coquetas orientadas al bullicio de la calle. “Queremos atraer riqueza económica, ocio y vida al corazón de Cartagena”, afirma el empresario, convencido de que el nuevo local será un motor para dinamizar la arteria más emblemática de la ciudad.
Rubira define la esencia del proyecto con una idea sencilla: “Una verdadera experiencia se construye con buen servicio, buen ambiente y un lugar de encuentro. Eso es lo que queremos que la gente se lleve de aquí”.
Con la apertura de Harrison Grand Café, Cartagena suma un espacio donde historia, modernidad y gastronomía se dan la mano. Un café que promete devolver al centro su pulso elegante y cosmopolita, y que aspira a convertirse en un símbolo del nuevo estilo de vida cartagenero.