El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revisado una décima al alza el índice de precios de consumo (IPC) de agosto, hasta el 2,3% interanual, cinco décimas menos que el mes anterior, mientras que la inflación de los alimentos se recortó seis décimas, hasta el 2,5%, la menor tasa en tres años.
Estadística sí ha confirmado la tasa de inflación subyacente, sin energía ni alimentos no elaborados, adelantada hace dos semanas, que se situó en el 2,7% interanual en agosto, una décima por debajo del mes anterior.
En la moderación del IPC ha influido el abaratamiento de los carburantes y lubricantes, que subieron en el mismo mes de 2023, y la bajada de los precios de los aceites y grasas, y de las legumbres y hortalizas, frente al encarecimiento de hace un año.
Con esta disminución interanual en el octavo mes del año, la inflación encadena tres meses de descensos después de las subidas experimentadas en marzo, abril y mayo, que llevaron al IPC a escalar hasta el 3,6%.
El Ministerio de Economía, que dirige Carlos Cuerpo, ha subrayado que la moderación continuada de los precios permite seguir avanzando hacia el objetivo del 2% del Banco Central Europeo. «La reducción continuada de la inflación sigue reflejando la capacidad de la economía española de compatibilizar el mayor crecimiento económico entre los principales países de la zona euro, como ponen de manifiesto los datos de crecimiento del PIB del segundo trimestre con un crecimiento de la economía española cuatro veces superior a la media de la zona euro, con una moderación de los precios. Estos factores, junto con la positiva evolución del mercado laboral, están permitiendo mejorar la capacidad de compra de los ciudadanos y la renta real de los hogares», ha defendido Economía.
Frente al retroceso de alimentos y carburantes, el INE constata un aumento de ocho décimas, hasta el 4%, de la tasa interanual del grupo de vivienda como consecuencia de la subida de los precios de la electricidad, mayor que la experimentada en agosto de 2023.