«Tenemos nubarrones a la vista porque, con un parque de limoneros más maduro que hace dos años y, si las condiciones climáticas y el suministro de agua acompañan, dentro de dos campañas se podría repetir el escenario del año pasado», ha advertido el director de Ailimpo, José Antonio García, en la evaluación de la campaña actual de limón que ha hecho para la Plataforma Tierra de Cajamar.
Según García, la disminución de la cosecha de esta campaña 2024-2025 ha permitido acompasar la oferta a la demanda del mercado y que los precios se mantengan en un buen nivel para los productores.
En cambio, vaticina que el hecho de que los plantones comercializados por los viveros sean muy superiores a los necesarios para garantizar la superficie existente, habla de un aumento en el parque productivo actual de 54.000 hectáreas, en unas 1.000 hectáreas más, que puede desembocar en una mayor producción en dos campañas, cuando estos plantones se encuentren a pleno rendimiento.
Esta situación mantiene, según Ailimpo, el problema estructural del sector del limón, e incluso lo agrava de cara a próximas campañas.
Evolución de la campaña 2024-2025
En este contexto, la campaña 2024-2025 supone un respiro para el mercado español del limón, que se recupera de las heridas sufridas en la campaña anterior, donde se quedaron unas 300.000 toneladas de limón sin recolectar. El limón nacional sigue siendo líder del mercado europeo y «siete de cada diez limones» que se comercializan en Europa llevan las siglas ES, que Ailimpo ha recuperado en sus campañas para identificar el origen español.
Según datos de Ailimpo, a 1 de febrero de 2025, las exportaciones de limón representan un total de 260.324 toneladas a la UE, un 3% más que en la campaña anterior. Respecto a los países terceros, se han enviado 8.308 t, un 24% menos.
Para los productores españoles de limón, Europa es el destino primordial de sus cultivos y, más allá de envíos reducidos a otros mercados, los destinos lejanos no son la principal baza para la inversión exterior del sector y se convierten en algo testimonial.
Para garantizar la rentabilidad del sector del limón, García ha incidido en la necesidad de proteger las producciones europeas de las plagas y enfermedades, que cada vez separan más la cosecha bruta de la neta, tras eliminar el porcentaje de destrío, que cada vez es mayor. Esta campaña, las mermas han aumentado un 2% hasta el 1 de febrero, con 17.043 toneladas registradas.
«La sanidad vegetal es clave. El cambio climático favorece las plagas, por la falta de herramientas fitosanitarias en la UE. Estas herramientas y el celo en las inspecciones fitosanitarias de las importaciones es una reivindicación irrenunciable del sector», señala el director de Ailimpo, que celebra que los controles en frontera de las importaciones hayan contenido las importanciones de Turquía.
El sector de la industria se encuentra a los mismos niveles de la campaña anterior, con 114.466 t, un 1% menos.
De momento, se han recolectado 472.362 toneladas de limón y quedan pendientes 507.368 por cosechar en los meses de febrero, marzo y abril, que suelen ser «meses de gran actividad exportadora».
Entre los competidores del limón nacional, las importaciones de Turquía y Egipto se han reducido un 10% esta campaña, lo que favorece a los agricultores españoles. Pese a todo, Ailimpo teme que Egipto, cuyos volúmenes de limón aún son testimoniales, pueda afectar a futuras campañnas como lo está haciendo en cítricos dulces como la naranja. Aún así, la posición de España en Europa sigue siendo «hegemónica» en limón.
Los precios de esta campaña se mantienen en un nivel aceptable entre los 0,30 y 0,40 euros/kilo, estables desde la semana 46 a la 8. Entre las semanas 40 y 43 de campaña superaron los 0,40 euros/kilo. Y es que, «la tensión entre oferta y demanda» está permitiendo un volumen de cosecha manejable, debido a que se ha reducido la producción por hectárea, lo que implica un rendimiento a la baja para el agricultor.