La plataforma francesa de financiación alternativa ClubFunding ha canalizado 70 millones de euros hacia 25 proyectos inmobiliarios en España desde su llegada al país en 2023, según datos facilitados por la empresa. Su propuesta conecta a promotores del sector inmobiliario con inversores particulares e institucionales dispuestos a financiar iniciativas urbanísticas a través de una fórmula diferente al préstamo bancario tradicional.
El modelo permite a los usuarios invertir desde 100 euros en promociones seleccionadas y obtener una rentabilidad de entre el 8% y el 15%, dependiendo del proyecto y del riesgo asociado. La operativa se gestiona íntegramente a través de su plataforma online, donde se publica la información clave de cada desarrollo.
En España, el mercado residencial concentra el mayor volumen de operaciones para ClubFunding, con especial interés en zonas con alta demanda y limitada oferta, como Valdebebas, Tres Cantos y otros barrios periféricos de Madrid. En total, la compañía ha financiado la construcción de unos 170 pisos desde su entrada en el país.
Aunque su servicio puede suponer un coste superior para los promotores respecto a la financiación bancaria, su propuesta acelera los procesos al ser más flexible y asumir un mayor nivel de riesgo. En muchos casos, ambas vías se combinan para completar la estructura financiera del proyecto, según explica Grégory Torrents, director de inversiones de ClubFunding.
La empresa solo acepta un 3% de las solicitudes de financiación que recibe, lo que refleja un enfoque selectivo y una estrategia de control del riesgo. Para 2026, ClubFunding proyecta movilizar entre 100 y 150 millones de euros en España, con la vista puesta en alcanzar los 1.000 millones en cinco años, replicando las cifras logradas en el mercado francés.
España es actualmente el segundo mayor mercado europeo de financiación participativa, detrás de Francia, y presenta, según Torrents, “un entorno favorable gracias a la alta demanda de vivienda y la escasez de oferta”.
ClubFunding España está controlada en su totalidad por su matriz francesa, que cuenta entre sus accionistas con Península Capital (fondo español vinculado a Borja Prado), el fondo francés Firac y la entidad pública BPI France. En Francia, la compañía ha evolucionado de plataforma de ‘crowdfunding’ a gestora de fondos, incluyendo vehículos como un fondo de 200 millones de euros apalancado por Citi Group.
En España, el registro de la CNMV recoge al menos 26 compañías con servicios de financiación participativa, una fórmula que continúa ganando tracción como vía alternativa de inversión y acceso al capital en el mercado inmobiliario.