Cartagena es una ciudad que vive el fútbol sala con pasión. Desde aquellas primeras patadas al balón en los años 80 hasta los éxitos recientes del Jimbee, este deporte ha escrito algunas de las páginas más memorables del deporte cartagenero. Para que esta historia no quede en el olvido, un grupo de aficionados ha dado un paso adelante y ha fundado la Asociación de Amigos de la Historia del Fútbol Sala Cartagenero (AFUSACA), una entidad que nace con la misión de rescatar, preservar y difundir el legado del fútbol sala en la ciudad.
Un homenaje a los héroes del 40×20
La creación de una entidad que pone en valor el patrimonio del fútbol sala de Cartagena rinde tributo a todos aquellos que han hecho historia en la ciudad portuaria. Desde el eterno capitán Javi Matía, pasando por las paradas milagrosas de Raúl Jerez, el talento de Mellado, o los goles inolvidables de Andresito, hasta leyendas internacionales como Sergio Lozano, Manoel Tobías o Lenisio, que han dejado su huella en Cartagena. Todos ellos forman parte de un patrimonio que merece ser contado y reconocido.
Cartagena, una ciudad que respira fútbol sala
Desde que la década de los 80 comenzaran a surgir los primeros clubes, la afición cartagenera ha vibrado con este deporte. La fusión de equipos en 1991 y el ascenso a la División de Honor en 1998 marcaron el inicio de una era dorada. Durante más de una década en la élite, el equipo y sus aficionados vivieron jornadas inolvidables, como aquel subcampeonato de liga en 2006 o las participaciones en la Copa de España.
Pero también hubo momentos difíciles, como el descenso en 2012. Sin embargo, la pasión de la afición y el empuje de nuevos proyectos llevaron al renacimiento del equipo, primero con Plásticos Romero y luego con la llegada de Jimbee, que ha llevado al club a lo más alto del fútbol sala nacional.
Llamamiento a la ciudad: AFUSACA busca apoyos para crecer
Desde este momento, AFUSACA inicia su actividad con el objetivo de desarrollar proyectos que mantengan viva la historia del fútbol sala en Cartagena. Pero para ello, necesita el apoyo de instituciones, empresas y aficionados.
«Desde AFUSACA empezamos a trabajar desde este preciso momento para encontrar apoyos, tanto públicos como privados, que nos permitan poner en marcha los diferentes proyectos que tenemos en mente y de los cuales iremos informando próximamente», afirman desde un comunicado.