La Comisión Europea ha decidido enviar una segunda carta de emplazamiento adicional a España por no haber transpuesto correctamente al Derecho nacional la Directiva 1999/70/CE del Consejo, que prohíbe la discriminación de los trabajadores con un contrato de duración determinada.
Según ha comunicado el organismo europeo, el Derecho español «contiene condiciones laborales menos favorables (como los derechos a vacaciones)» para los trabajadores interinos del sector público español, en comparación con los trabajadores fijos.
Para la Comisión, esto supone una discriminación contraria al Derecho de la UE, por lo que ha incoado este procedimiento de infracción en 2014. Aunque España ha modificado las normas desde entonces, el organo de Gobierno comunitario considera que «siguen existiendo problemas de discriminación».
En su segunda carta de emplazamiento adicional, la Comisión aborda las diferencias de trato en relación con el cálculo de la antigüedad, el derecho a algunos tipos de permisos o el acceso a trayectorias profesionales.
España dispone de dos meses para subsanar las deficiencias detectadas por la Comisión y, de no hacerlo, la Comisión podría optar por enviar un dictamen motivado.