El Comité Ejecutivo extraordinario de CEOE acordó este martes plantear una subida del 1,5% del salario mínimo interprofesional para 2026, lo que situaría la cuantía en 1.202 euros brutos mensuales en catorce pagas y sujetos a tributación en el IRPF. La organización justifica que esta propuesta reproduce la referencia prevista para los empleados públicos y se ajusta a los objetivos de la Directiva Europea de Salarios Mínimos, entre ellos fomentar la negociación colectiva y asegurar un nivel de vida adecuado.
La patronal condiciona el incremento al cumplimiento de las reglas de absorción y compensación del Estatuto de los Trabajadores. Según explican CEOE y Cepyme, el SMI ya habría superado el 60% del salario medio neto que utiliza el Ministerio de Trabajo para su cálculo. Argumentan que la Encuesta de Población Activa (EPA) es más representativa que la Encuesta de Estructura Salarial porque incluye sectores como agricultura, ganadería, pesca o servicio doméstico, donde se concentra gran parte de los perceptores del SMI.
Las organizaciones presididas por Antonio Garamendi y Ángela de Miguel sostienen que la EES genera una distorsión al alza del salario medio al excluir esos ámbitos. Subrayan además que la EPA ofrece datos más recientes, ya que los últimos corresponden a 2024, mientras que la EES refleja resultados de 2023. Con la EPA, el SMI de referencia para 2025 sería de 15.760 euros anuales, es decir, 816 euros menos que los 16.576 euros aprobados para este año, lo que implica que la cuantía vigente estaría 4,9% por encima de lo que correspondería.
Pese a estos cálculos, el Comité Ejecutivo ha decidido proponer la subida del 1,5%, lo que elevaría la renta mínima a 1.202 euros, frente a los 1.184 euros actuales. CEOE recuerda que, si se tomara como válida la referencia que emplea el Ministerio de Trabajo, no habría margen para ninguna revalorización en 2026.
Mientras tanto, las organizaciones sindicales CCOO y UGT defendieron hace unas semanas un incremento del 7,5%, que situaría el SMI en 1.273 euros mensuales en catorce pagas, también con tributación obligatoria. Trabajo ha pedido al comité de expertos que asesora al Gobierno que formule dos escenarios para 2026, uno con IRPF y otro sin él.