La última novela de Arturo Pérez-Reverte, Misión en París, ha superado los 100.000 ejemplares vendidos en apenas un mes desde su publicación en septiembre. El libro, que retoma al capitán Alatriste tras catorce años, confirma el interés del mercado por una saga que mantiene su solidez comercial casi tres décadas después de su creación.
La primera tirada de ejemplares se agotó en una semana, lo que llevó a una edición de 50.000 libros más para atender la demanda de librerías y lectores. Actualmente, la novela se encuentra en la segunda edición y las cifras de venta sitúan a Misión en París entre los lanzamientos más relevantes del año en el sector editorial español, tanto por ritmo de distribución como por repercusión internacional.
El éxito ha impulsado además la recuperación de los títulos anteriores del personaje, que acumulan más de 27 millones de lectores y traducciones a 40 idiomas.
Cartagena acoge la presentación y el anuncio de un monumento a Alatriste
La presentación se celebró en el Centro Cultural Fundación Cajamurcia de Cartagena, con asistencia de representantes institucionales y del ámbito cultural. Pérez-Reverte explicó la elección de su ciudad natal como punto de partida:
“Tenía que ser esta vez en Cartagena, primero porque yo soy de aquí, y segundo porque Alatriste pertenece al Tercio Viejo de Cartagena. Y además porque por unanimidad municipal han decidido levantar un monumento de bronce al capitán Alatriste, obra de Salvador Amaya, que se inaugurará en primavera. Será un homenaje a los soldados que a lo largo de la historia de España embarcaron desde Cartagena hacia guerras lejanas. Me honra mucho que la figura elegida para representarlos sea Alatriste”.
El autor subrayó su satisfacción por la recepción del libro que ha ido calando en los lectores y colegios que trabajan con él. «Haber ayudado, en la pequeña parcela que me corresponde, a que la historia de España sea más conocida y esté más asumida, me hace sentir muy satisfecho”.
Respecto al futuro de la saga, añadió: “Debía un Alatriste más y he cumplido un compromiso con los lectores. Al menos me queda otro por escribir, aunque no sé si lo haré”.