Los gobernadores del Banco Central Europeo (BCE) siguen el guion establecido y anunciaron este jueves que dejan el tipo de interés de referencia en el 2%, por segunda reunión consecutiva. Una de las razones es que prevén que la inflación se mantendrá estable a medio plazo.
El BCE informó que el Consejo de Gobierno deja sin variaciones el precio del dinero porque «la inflación se sitúa actualmente en torno al objetivo del 2% a medio plazo» y su valoración sobre las perspectivas de inflación se mantiene prácticamente sin cambios.
De momento, las nuevas previsiones de los economistas del BCE apuntan a que la economía de la zona euro crecerá un 1,2%, una previsión mucho más optimista que la presentada el pasado mes de junio, aunque los pronósticos tienden a la baja de cara al año próximo.